Antes de la cirugía el pequeño Mauro estuvo un mes recibiendo antibióticos muy fuertes y entubado debido a que contrajo una infección por medio del catéter que se le colocó en el hospital de la Mujer cuando nació.
Después de la operación se recuperó rápido y a los dos meses de vida lo dan de alta y por fin llegó a su casa, donde seguía con medicamentos en espera de su segunda cirugía.
Sin embargo, unos días antes de que lo programen cae en choque en el interior de su domicilio en San Agustin debido a que su cuerpo no recibía la oxigenación adecuada.
El bebé fue llevado ese día, 22 de junio, por su madre de urgencia al hospital regional del IMSS #196 Fidel Velazquez Sánchez, ya que es el más cercano al domicilio de la familia.
El bebé fue estubado y estabilizado en el área de urgencias, pero personal de trabajo social y la subdirección del hospital le informaron a la mamá que tenia que pagar $1008 de la consulta de urgencias primero que nada. Después le exigieron que consiguiera un hospital y una ambulancia para que se llevara a su hijo, ya que ella no es derechohabiente del IMSS.
“Les pedí primero que por favor lo trasladaran a un hospital de gobierno donde lo puedan atender y se pueda recuperar, ya que debido al choque y la falta de oxigeno sus órganos se empezaron a afectar”, señaló la madre del niño.
Sin embargo, ” como no llaman, ni buscan un hospital, ni les interesa, pedí un resumen clínico y fui a buscar a los hospitales de gobierno con terapia intensiva y cardiólogo donde solo recibí negativas; que no hay lugar, que no puedo hacer el contacto yo sino de hospital a hospital, que esta muy grave para recibirlo en su unidad y que lo lleve al hospital donde lo operaron. Como es posible… que me digan simplemente no hay lugar señora ni nada que hacer… Entonces que debo hacer?… Dejo morir a mi hijo?… “, agregó.
“Me duele tanto y tanto ver el enorme esfuerzo que hace mi hijo por seguir viviendo a pesar de todo porque de verdad quiere vivir y si él lucha de tal manera por que yo no”, concluyó.
Los familiares de Mauro esperan que esto llegue a alguien que tenga el corazón para entender la situación en la que está el bebé y puedan ayudar, asesorar o dar un lugar en un hospital de gobierno donde el niño reciba la ayuda que necesita para seguir adelante.
Mauro ha sobrevivido a un cateterismo, un paro, una neumonía, un choque y ahorita está resistiendo porque tiene muchas ganas de vivir.
Cualquier ayuda por favor comunicarse con Griselda Arámbula, mamá de Mauro al teléfono 55 40 75 38 58.